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A partir de nuestros años de experiencia y ante la complejidad del tratamiento de este tipo de neoplasias, nos mantenemos en constante actualización para ofrecer los últimos avances y técnicas modernas, que nos permitan ofrecer un mejor pronóstico y bienestar al paciente.

¿Qué es el cáncer de amígdalas?

Básicamente, el cáncer de amígdalas es el crecimiento anormal y muy desarrollado de las células que se forman en dichas estructuras. 

Las amígdalas son dos óvalos ubicados al fondo de la boca, los cuales forman parte del sistema inmunitario del cuerpo.

Síntomas del cáncer de amígdalas

Síntomas iniciales del cáncer de amígdalas

Sin duda, la mayoría de los síntomas iniciales del cáncer de amígdalas no son diferenciales a los de otras patologías menos graves de la garganta. 

Es por ello que en muchos casos este tipo de cáncer es detectado de manera tardía, ya que el paciente decide automedicarse o puede ser tratado de manera errónea.

Proceso de diagnóstico del cáncer de amígdalas

Para diagnosticar el cáncer de amígdalas, el médico tratante solicitará algunas pruebas y procedimientos, entre cuales se encuentran: 

Cáncer de amígdalas

Importancia de la detección temprana del cáncer de amígdalas

A partir de la cantidad de casos cuya detección ha sido efectuada de manera tardía, los médicos recomiendan hacer revisiones dentales de rutina o un examen completo de la boca, para detectar a tiempo cualquier anomalía. Sin embargo, no existe una prueba de detección temprana para el cáncer de orofaringe y cavidad oral. 

En particular, muchos casos de cáncer de amígdalas son detectados casualmente durante la revisión de control rutinario que realiza un dentista o cuando se solicita atención médica por presentar síntomas leves. 

Aun así, la detección temprana influye en gran medida en la salud del paciente; permitiendo que el tratamiento ofrezca mejores resultados al combatir eficazmente el cáncer.

Etapas del cáncer de amígdalas

Tan pronto como se obtiene un diagnóstico positivo de cáncer de amígdalas, el médico tratante debe evaluar que tanto se han diseminado o no las células cancerosas en el cuerpo. Para ello se realiza la estadificación o determinación de la etapa del cáncer.

Etapa I

Mientras el tumor detectado no mida más de 4cm, el nódulo de 1 ½ pulgada aproximadamente y solo se observe propagación de uno o más ganglios linfáticos del mismo lado del tumor; estamos ante un cáncer en estadio I. 

En particular, no se observa diseminación hacia sitios distantes; lo cual ubica la tasa de supervivencia relativa a 5 años para estos pacientes en un 76%.

Etapa II

En este estadio se observa que el tumor mide más de 4cm y está creciendo en la epiglotis, laringe, lengua, paladar duro o mandíbula. De hecho, en estos casos ya se ha propagado a uno o más ganglios linfáticos sobre el lado opuesto, pero ninguno llega a medir más de 6cm. 

No se observa metástasis hacia otras partes distantes; ubicando su tasa de supervivencia en 45%.

Etapa III

Por otro lado, ya en esta etapa es posible observar que el cáncer se ha propagado hacia la epiglotis, se ve más expandido en la laringe, ha alcanzado la placa pterigoidea media y también el paladar duro. Asimismo, se ha propagado a ambos lados del cuello, midiendo más de 6cm. 

Aun así, no se observa diseminación de las células cancerosas hacia otros sitios distantes, solo en la cavidad oral y orofaríngea. La tasa de supervivencia en esta tercera etapa es del 25%.

Etapa IV

En esta última etapa de la clasificación, se manifiesta mucho más la presencia del cáncer diseminado. Ya el tumor tiene un gran tamaño, los nódulos y ganglios linfáticos están muy agrandados y la propagación de las células cancerosas ha sido inminente. 

Ya se observa metástasis en los pulmones y a nivel óseo. En esta etapa terminal, la tasa de supervivencia es muy baja, alcanzando entre 8 y 10%, en relación a 5 años.

Tipos de cáncer que afectan las amígdalas

Existen diferentes tipos de cáncer que pueden desarrollarse a nivel de las amígdalas, cada uno de ellos con características particulares que influyen en su esquema de tratamiento.

Carcinoma de células escamosas

Este tumor es poco frecuente, pero se desarrolla en cabeza y cuello. Su principal característica es que se presenta como una neoplasia epitelial maligna, con evidencias escamosas.

En el caso del carcinoma de células escamosas, existe asociación con el Virus del Papiloma Humano (VPH). Los tumores de VPH positivos, se desarrollan con una elevada predilección por la base de la lengua y las amígdalas.

Casi siempre son diagnosticados en un estadio clínico avanzado, presentando síntomas como dolor de garganta, disfagia y masa en el cuello. Entre sus factores de riesgo destacan el hábito de fumar y el consumo excesivo de bebidas alcohólicas.

Linfoma

En contraste, este tipo de cáncer se desarrolla cuando las células comienzan a crecer descontroladamente en el tejido linfoide, del cual forman parte las amígdalas y la epiglotis.

Particularmente, al hablar de linfoma, existen dos tipos: el linfoma No Hodgkin y linfoma de Hodgkin.

Carcinoma de glándulas salivales

Tienen su origen en las glándulas del revestimiento de la boca y de la garganta. Existen varios tipos de cáncer en las glándulas salivales menores, que incluyen el carcinoma adenoide quístico, carcinoma mucoepidermoide y el adenocarcinoma polimorfo de bajo grado

Carcinoma verrugoso

Este último tipo de cáncer es de desarrollo lento y rara vez se propaga a otras partes del cuerpo, pero si llega a diseminarse hacia el tejido adyacente.

Como dato adicional, estos tumores forman parte de los tipos clasificados de cáncer de células escamosas.

Cuidados de enfermería en pacientes con cáncer de amígdalas

Los cuidados que provee el personal de enfermería, incluyen las siguientes áreas de atención:

¿Cómo prevenir el cáncer de amígdalas?

Aunque no existe una vacuna o medida preventiva que impida en un 100% la aparición de algún tipo de cáncer; es posible establecer ciertos cuidados para reducir los riesgos. 

Básicamente, los hábitos de vida saludables como hacer ejercicios, una buena alimentación, no fumar y controlar la obesidad; son medidas que no solo ayudarán a reducir el riesgo de cáncer, sino que además ayudan en general al buen funcionamiento del organismo. 

Cáncer de amígdalas

Preguntas frecuentes

¿Dudas? Encuentra las respuestas a las interrogantes más frecuentes que nos plantean nuestros pacientes.

Durante el estadio IV el cáncer de amígdalas se hace crónico o terminal, ya que se produce la diseminación de las células cancerosas en todo el cuerpo (metástasis).

Las personas con antecedentes causados por defectos genéticos hereditarios (mutaciones) suelen tener mayor riesgo de padecer cáncer de garganta u oral. 

 

Por ejemplo, los pacientes que presentan Anemia de Fanconi, suelen tener problemas en la sangre que conducirán a una leucemia o anemia aplásica. Esto eleva el riesgo de padecer un cáncer de boca y garganta.

 

De igual forma, quienes presenten una Disqueratosis congénita, la cual produce erupciones en la piel y uñas anormales en manos y pies; se suman a quienes presentan mayor riesgo de padecer cáncer de boca a temprana edad.

Existen varias opciones de tratamiento, y su vinculación con el pronóstico del paciente, dependerá del tipo y estadio del cáncer; así como también de su estado de salud en general.

 

En particular, algunas de las opciones de tratamiento para el cáncer de amígdalas pueden incluir cirugía, radioterapia o una combinación de ambas. 

Dr Roberto Garcia
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"Mi mayor motivación como Cirujano Oncólogo en Panamá, es tener la oportunidad de ayudar a cada paciente a encontrar múltiples razones para seguir luchando."

Roberto García

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